Cerro Alico de San Fabián
Una grata jornada
Un soleado 2 de febrero del año en curso, tuve la oportunidad de asistir a una actividad auspiciada por la Ilustre Municipalidad, para la comunidad de San Fabián en el contexto del programa de verano que propicia en ésa localidad, cómo lo fue la Ascensión al Cerro Alico.
Habiendo recibido oportunamente con días de anticipación un correo informativo de parte de la empresa turística Campobase, que invitaba a ser parte del evento a realizarse, se dispuso el tiempo necesario para no faltar a la citada ascensión.
De los antecedentes recabados en terreno, el evento que comentamos ya tiene varios años de realizarse, el cual por encargo municipal, es responsable de su organización la empresa turística mencionada, quien se encarga de disponer de su personal, específicamente sus guías que llevan a buen término, una jornada al aire libre que en su justa medida, responde a las expectativas consideradas.
Desde la salida, 8 horas de la mañana, participantes de todas las edades se integraron a un paseo de mediana dificultad cómo lo es subir un cerro que requirió de no menos de dos y media horas para llegar a un hermoso mirador natural en donde casi todos lo disfrutamos.
Mención especial es la organización en terreno, en que los Guías de Campobase en número no inferior a ocho, de manera muy responsable se preocuparon de que nadie de los participantes quedara aislado o rezagado. Incluso acompañaron a aquellos excursionistas que por razones de índole física no pudieron llegar a la cumbre. Felicitaciones por ello.
De parte de la Municipalidad de San Fabián, asistió cómo veedora una joven funcionaria del Depto. de Turismo, que con muy buena voluntad facilitó las fotos que acompañan este artículo. Su presencia revela preocupación de parte de la Autoridad Edilicia por velar que todo se desarrolle con normalidad y se logre de ésta actividad un buen resultado
Un reconocimiento a la distancia para el espíritu ecologista que en todo momento hizo evidente el personaje que todos los pueblos tienen.
Me refiero en éste caso a Francisco Valenzuela, a quien ya todos conocemos cómo “Cholito”, quien llegó de los primeros a la convocatoria, premunido de un saco para acumular las basuras que la actividad pudiera generar.
Rápidamente “nos recordó”, la inconveniencia de botar desechos en la montaña y que con su actitud auto impuesta estaba atento a traerse cualquier desecho de vuelta a la ciudad.
Por mi parte cómo producto de la ascensión, conozco un nuevo lugar natural que espero seguir visitando con la regularidad que me permita mi tiempo disponible. Esto tras el objetivo personal de seguir conociendo cada vez más la naturaleza de Ñuble.
Nota: Mis agradecimientos a la Señora Susana Correa C de las Cabañas y Camping Bullileo por su hospitalidad durante mi estadía.
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